Consejos para encontrar el almacén ideal para tu negocio
Encontrar un almacén, bodega o nave industrial es una de las decisiones empresariales más importantes que tendrás que tomar. Allí es donde resguardarás tu mercancía, productos y materias primas.
Alquilar o comprar un espacio de almacenamiento para tu negocio es una decisión crucial, y elegir la ubicación adecuada puede mejorar significativamente la capacidad de una empresa para competir y atender eficazmente a sus clientes.
¿Qué debes de tener en cuenta a la hora de elegir una bodega o nave industrial?
Contrario a lo que se cree, el coste y el espacio de almacenamiento que puedan ofrecer estos lugares no son solo los únicos aspectos que se deben tomar en cuenta. Aunque son factores cruciales, existen otros que igualmente determinarán si la inversión dará sus frutos.
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Hemos enumerado los siguientes para ti:
1- Disponibilidad de mano de obra, cualificaciones y costes laborales
Lamentablemente, no todas las ubicaciones geográficas ofrecen una mano de obra con las cualificaciones adecuadas al precio adecuado. Por esta razón, es importante que evalúes la demografía local para que sepas con qué estarás lidiando.
Al evaluar la disponibilidad de mano de obra, ten en cuenta lo siguiente: la baja disponibilidad de mano de obra y una alta demanda harán que suban los salarios (lo que significa que el coste de explotación será mayor). Lo contrario también es cierto. Un alto nivel de disponibilidad de mano de obra y una baja demanda reducirán los salarios.
Además, es importante que sea una mano de obra cualificada, ya que la calidad del servicio al cliente está en juego. Y si bajas la calidad de la entrega de tus servicios, tu competitividad empresarial se verá amenazada.
2- Carreteras, autopistas y fluidez del tráfico
Fíjate qué tan accesible tendrás a las carreteras y autopistas que pasen cerca del almacén. ¿Es una zona con mucho tráfico o no? Son cosas que es necesario evaluar sobre todo si el transporte principal son camiones.
Además, ten presente los siguientes factores:
- Accesibilidad a autopistas y rampas de salida.
- Interconectividad de las autopistas.
- Penetración del transporte público.
- Velocidad media del tráfico.
- Horas pico de tráfico.
- Seguridad y estado de las carreteras.
- Señalización adecuada de las carreteras.
Factores como autopistas y carreteras de superficie congestionadas, así como sistemas de señalización deficientes, aumentarán el consumo de combustible, la tasa de accidentes y tiempo perdido.
3- Integración logística: proximidad a aeropuertos, vías férreas y puertos.
La ubicación está estrechamente relacionada con la integración logística. Aquí es vital pensar un paso por delante. ¿Tu mercancía será enviada a otro lugar? ¿Adónde van a ir después tus productos desde el almacén? ¿Se distribuirán en el mercado local o enviarán a otro lugar? ¿Vas a recibir productos con frecuencia?
En este caso, hay que priorizar el modo o modos de transporte principales utilizados para recibir o enviar mercancías desde y hacia el almacén. Por ejemplo, si la mayor parte de la carga se importa/exporta por vía aérea, entonces querrás estar lo más cerca posible del aeropuerto.
Si esto no es posible, al menos debe explorar instalaciones con fácil acceso a autopistas y carreteras que ofrezcan una conexión directa con el aeropuerto. Además, el traslado de un almacén a otro requiere mucho trabajo, tiempo y dinero, por lo que es importante tener en cuenta varios factores antes de elegir un almacén para tu mercancía. El objetivo es que no satisfaga únicamente tus necesidades actuales, sino que también sea capaz de satisfacer tus necesidades futuras.
Lo que nos lleva al siguiente punto…
4- Diseño del almacén: presente y futuro
Hoy en día, cuando todas las empresas tratan de racionalizar sus operaciones de depósito para satisfacer las demandas de los clientes, contar con un diseño de bodega o nave industrial optimizado también es clave para seguir siendo competitivos. Es necesario para garantizar el éxito de tus operaciones.
En definitiva, una bodega o nave industrial bien diseñada mejora el flujo de tráfico en tu almacén, reduce las pérdidas de inventario y aumenta la eficiencia general. Así que no pierdas de vista este factor.
Además, asegúrate de que el diseño del almacén tenga en cuenta solo lo que el almacén almacena actualmente, sino también las mercancías y la capacidad previstas para el futuro.
Necesitas prever la posible adición de muelles de carga adicionales, maquinaria y fácil acceso para la instalación de nueva tecnología. Muchos operadores de almacenes construyen para las operaciones actuales y no crean espacio para ajustarse y adaptarse a los cambios tecnológicos.
5- Precio del almacén
El precio de la bodega o nave industrial influirá inevitablemente en tu decisión, pero hay muchos aspectos relacionados con el coste que también deberían influir. Por ejemplo, si tu clientela principal se encuentra en un lugar céntrico, deberías ver lo caro que resulta un almacén en esa ubicación. Otra alternativa es un almacén más alejado. En ese caso, pregúntate ¿Es más barato el coste del edificio? ¿Costará mucho más el transporte a largo plazo? Hay muchos gastos que se pasan por alto cuando se busca el almacén perfecto, así que intenta incorporarlos todos a tu planificación financiera.
6- Seguridad de las instalaciones y satisfacción laboral
Los empleados son el recurso más importante en tu empresa. Por ello, necesitas que las instalaciones cumplan con los estándares de seguridad y ofrezcan el mejor apoyo posible al trabajo de los empleados.
¿Qué significa esto? Asegurarse de tener puestos de trabajos seguros y ergonómicos. Para ello, el diseño del espacio es vital. Cuando visites el lugar sería ideal que te acompañara el jefe de personal o que el equipo te especificara lo que necesitan tener para rendir a un alto nivel en su trabajo.
Conclusión
En definitiva, elegir una nueva bodega o nave industrial es siempre una decisión estratégica. Requiere de una cuidadosa consideración que debe basarse en los aspectos claves y el desarrollo futuro de las operaciones comerciales de tu empresa, incluida la logística, los bienes físicos y las personas.
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